El fresquito se empieza a notar y también las lluvias otoñales. A sacar abriguitos del armario, bufandas y… ¡las botas de agua! ¿A quién no le gusta chafar los charcos como si fuéramos niños?

Tengo que reconocer que las botas de agua siempre me han chiflado. Recuerdo, que cuando iba al cole… los días de lluvia eran una fiesta. Mi madre sacaba las botas de agua del armario (rosas unas temporada, azul marino otras) y me pasaba tooooodo el camino pisando charquitos. Tengo que decir que, aunque he crecido… sigo teniendo la divertida costumbre de chafar los charcos a mi paso. En esta vida hay que mojarse, ¿no? 😉

Pues para chafar charcos como toca qué mejor que hacerlo con botas de agua súper bonitas y llenas de color. A ver qué os parece esta selección que he hecho de mis favoritas.

Éste modelo es de Bimba y Lola y, aunque hay en más colores, el azul y el rojo me han encantado (y ahora están de oferta).

La marca Igor me chifla. Si en verano sus cangrejeras triunfaron, en invierno llega el momento de las «water boots». Fabricadas 100% en España, tienen un aire muy similar a las famosas Hunter y con unos colores muy chulos. Por cierto, su imagen de la temporada otoño invierno 2013-1014 es genial (un ejemplo es la primera de las fotos del post).

Aquí abajo algunos modelos de Hunter en muchos colores.

Gioseppo también tiene unas botas muy especiales y es que… no parece que sean de agua… Juzgar vosotras mismas 😉 Son ideales para llevarlas todos los días

Y navegando por la red también he descubierto la marca británica Joules y los estampados que tienen son puro amor que dan un toque de distinción. Estos diseños no pasan desapercibidos y seguro que dan un gran protagonismo a los pies.

Y… ¿qué hacemos con las botas de agua cuando no llueva o si se les quedan pequeñas a los peques? ¡Pues podemos usarlas como floreros! Mirar qué idea tan divertida y original.

¿A vosotros os gustan las botas de agua? Si queréis ver más fotitos podéis verlas en el Pinterest de moñaditas.